Este fin de semana ha sido especial.
¿Por qué? pues porque nos hemos encontrado unos habituales que llevamos tiempo sin hacer montaña juntos. Más que nada porque Lorenzo pasó una temporada de lesiones que lo apartó de este mundillo por unos años. ¡¡¡Pero vuelve!!! 🙂
El plan era más de estar juntos que de hacer algún reto en particular. Salimos sábado por la mañana a una hora poco adecuada para hacer nada cañero. Con parada para desayunar, por supuesto.
Gra de Fajol Petit, bien cargado
Ulldeter estaba cargadito de nieve, gente a punta pala con esquís, raquetas o de cursos de alpinismo (cursos de Glacera y Oxineu). Nosotros salimos poco antes de la una del refugio después de dejar los trastos para dormir. Con raquetas a la espalda.
Sólo vemos una cordada en la Estreta, que desgrimpará. Debe estar chungo.
Llegamos hasta el Coll de la Marrana, tramo final con raquetas. La verdad que no sé si hacían falta. Me hundía ligeramente antes de ponérmelas y como es lógico a la bajada nos hundíamos un poco.
Ni Lorenzo se veía con cuerpo para subir hasta la cima del Bastiments (le había molestado la rodilla días antes), ni yo tenía tampoco gran pasión por llegar al no ir calzado con mis queridos esquís. La verdad que hacía días que no usaba raquetas, y si antes me parecía un mal menor, ahora me parecen un coñazo!!
Coll de la Marrana y Bastiments
Bueno, vuelta al refu y momento birras y cachondeo de darnos guerra entre los tres. Gran tarde. Cenaremos y nos iremos pronto a dormir, no sin seguir con el cachondeo y hablar también de temas más serios.
El día siguiente bajamos hasta el coche con todos los trastos con la intención de hacer el Pic de la Dona. Pero Lorenzo nos alerta. Le está doliendo la rodilla. Así que cambiamos planes. Nada más de monte este finde. Nos paramos en Camprodon a hacer el guiri. Comprar pan y queso, tomar algo, etc… 😉
Y vuelta a Barcelona.
Por la tarde saldré a correr por Barcelona. Otro recorrido guay por Collserola saliendo del mirador en la Carretera d’Olèrdola, al lado de Vallvidrera. Haré 10k y unos casi 600m de desnivel positivo. Las vistas son guapas, se ve hasta la costa del Maresme. Aquí una panorámica: