Esta semana pasada estuve en Moscú de viaje de negocios.
Lo divertido de la cuestión es que cuando viajas por trabajo puedes ir a sitios muy llamativos, y tus amigos te envidian, pero al final no ves nada de nada. Sólo trabajo y con suerte los locales te sacan a cenar.
Empecé a viajar de forma intensiva este mes, y recordé una conversación con uno de mis jefes anteriores.
Él estaba trabajando en un proyecto en India que le obligaba a viajar tanto que empezó a llevarse las zapatillas de correr consigo. Al menos había algún deporte que podía practicar en cualquier momento y lugar.
De ahí se fue pillando en el tema de correr, hasta el punto que ha hecho una Iron Man y sigue participando en maratones y triatlones. Par mí una progresión impresionante.
Así que empecé a copiarlo, y las wambas de correr van conmigo allí donde voy.
The week before I was in Moscow on a business trip.
The funny thing of going for business is that you can go to many fancy places, and your friends envy you for that, but in the end you don’t see anything at all. Just working and if you are lucky the locals bring you out for dinner.
I started travelling quite often this month and remembered a conversation with one of my former bosses.
He was working in a project in India and travelling so much that he started to take running shoes with him. At least there was some sport he could do at any time and any place.
From there he got caught on the running topic and even participated in an Iron Man and still runs Marathons and triathlons. I was really impressed.
So I started copying him, and the running shoes go with me wherever I go.
Lo que mi exjefe no me mencionó es que también abrió mis posibilidades de visitar la ciudad.
Me encontré a mí mismo corriendo en el casco antiguo de Bruselas, y esta última semana corriendo desde mi hotel a la Plaza Roja y el Kremlin. Es por la noche, porque no soy persona madrugadora, así que todos los turistas -que siempre hay- me miraban sorprendidos como si fuera un astronauta.
Descubrí hace un tiempo la aplicación Endomondo para smartphones y estoy muy contento de esta combinación del teléfono móvil con un GPS que almacena el track de la ruta, un entrenador que te indica tus tiempos, velocidad y distancia a cada kilómetro. Más buena música para mis oídos y una cámara para sacar fotos chulas como esta:
¿Qué más puedo pedir?
The funny thing that he did not mention is that it opened my possibilities to visit the city.
I found myself running in Brussels old city, and this week running from the hotel to the Kremlin and Red Square. It is at night, as I am not an early bird, so all the tourists –there are always- were staring at me like I was an astronaut.
Discovered some time ago the Endomondo app for smartphones and I am really happy about this combination of your cellphone with a GPS that tracks your route, and a trainer that tells you your pace, time and distance every kilometer. Plus some nice music for my ears and a camera for some nice pics, like this one.