Hace ya unos cuantos días a finales de julio, estuve con Alex de travesía por glaciares en Los Alpes.
El sábado salimos desde su casa en Montpellier, bien pronto, alucinados por lel atasco bestial que había ne la autopista a las siete de la mañana!! en dirección contraria, a por el sol…por suerte para nosotros.
Pero no pienses que nos libramos. Al llegar a Chamonix los que iban al túnel del Montblanc tenían 1h30 de espera, y la cola llegaba hasta la carretera afectando a los que iban a Chamonix. Vaya tela!!!
Bueno, de ahí a Argentière y como somos muy machotes 😛 no cogimos teleférico y salimos a pie desde le mismo Argentière después de comer bien, por supuesto. Algo tarde, era la una y pico y la cena en el refugio de Argentière (2..771m) supuestamente a las siete.
Se nota que he estado corriendo por montaña y que ayuda a la forma porque tiraba más en la subida, aún yendo cargado. Y eso que del peso he perdido la costumbre. La primera parte hasta el refugio de Lorgnan la hicimos bastante rápido, cerca de hora y media. Nos tomamos algo y seguimos para arriba.
Refugio de Lorgnan, principio del glaciar
La parte siguiente ya es más liosa, subes un poco más bordeando la parte más rota del glaciar por roca, todavía hay turistas por ahí admirando las vistas. Y luego ya te metes en el glaciar en un tramo plano. Como a Alex le gustan los glaciares rápidamente acabamos por en medio pisando hielo con toppings de piedrecitas y rocas. No hace falta crampones ni encordarse, que es todo muy obvio. Las grietas se ven a distancia…
Después hay otro momento donde el glaciar se pone convexo y está totalmente roto. Tienes que ver el glaciar como un fluido muy denso, va cayendo a un ritmo muuuy lento, en las zonas cóncavas hay más presión y menos grietas, en las zonas convexas se rompe por todas partes porque la parte de abajo cae más rápido, a su ritmo también claro 😛
En el glaciar de Argentière
El mismo mapa ya marca el camino, hay que meterse de nuevo en rocas para rodear esta parte que no parece nada franqueable. Marcas amarillas gigantes que marcan una escalera que sube unos cuantos metros..
Es de esas que no me gustan, muy fácil porque es una escalera pero expo porque como te caigas…uy
Después de flanquear bastante por roca y destrepar volvemos a estar en el glaciar. Si vas a ir por ahí, sobre todo, mantente por la derecha. Se ve evidente que tiene menos pendiente y está menos roto. Por dónde fuimos nosotros? obviamente por la izquierda y acabamos en un mar de roca y hielo roto, perdiendo el tiempo de mala manera. Al final por fin apareció el camino, marcas amarillas de nuevo. El refugio está como escondido, subes por el camino sin haberlo visto aún. Como para ir perdido por ahí…
Total que llegamos a las ocho y pico, en unas 7h en total más que las indicaciones de lso carteles. Suele pasar cuando sales del camino en mi opinión. Debimos hacer unos 1700 o 1800m de desnivel positivo, con mochila con arnés, cuerda, crampones. Nada acostumbrado.
La guarda del refu conocía a Alex y le dice “tarde, como siempre”…no haré comentarios 😛
Pero nos dio de cenar. Nuestra intención era pasar por el col de Chardonnay hasta el refugio de Trient, para más adelante volver a Francia al refugio Albert 1er. Pero la guarda puso el grito en el cielo con ese collado. Muy peligroso por caída de piedras.
Los Alpes están muy secos este año, de hecho han cerrado al ruta normal a Gouter porque en el couloir aquel que los catalanes llamamos la bolera porque caen piedras aleatoriamente, ahora ya es francamente peligroso cruzar. Refugio de Goûter nuevecito recién hecho, y cerrado. Ay…
Tuvimos debate esa noche y también por la mañana, entre si ir a mirar al collado o bajar directamente. Hay cuatro gatos en el refugio de Argentière, al verdad, porque es un poco cul de sac si por ahí no se puede pasar.
Al final por la mañana decidimos bajar. Esta vez usando teleférico. Son 4h30 hasta llegar al teleférico. Luego decidimos abajo qué hacer.
De vuelta, antes de grimpar por la roca
Como teníamos reserva en Trient decidimos hacer jornada a saco y llegar hasta el refugio pasando por el Albert 1er. Esta vez con todos los teleféricos posibles. De hecho nos comemos un bocata en el mismo trayecto para ganar tiempo. El Albert 1er es el refugio más concurrido por turistas de todo el valle, porque se puede llegar andando por camino de tierra y rocas y e quedas encima del glaciar con vistas bien impresionantes. Vamos que el refugio es ahora un restaurante a la carta!
Montblanc desde el valle
Otro momento de crisis, Alex quiere meterse por el glaciar porque lo ve más directo, pero está roto de cojones, al final acordamos ir a buscar el camino más arriba cruzando a través por la morrena porque ya nos hemos salido del camino. Y luego el tramo siguiente es una autopista. Hay una traza por la nieve de la ostia, aunque se cruzan algunas grietas que dan yuyu por su exagerada dimensión y su profundidad indiscernible. uuuuy
Aquí no cabe decir que vamos encordados full equipe!!!
Hacemos otra cagada, en vez de coger el col du Tour superior, por donde va la mayoría de traza, nos vamos a buscar el normal porque se supone que es más plano y menos lío. pero al llegar nos encontramos que no hay nieve suficiente y tiene un hoyo de unos veinte metros de profundidad, infranqueable. Flanqueando a la izquierda, y grimpando por roca protegiendo con cuerda conseguimos pasar…pero bueno…alguien ya había pasado por allí pero tenía el riesgo de no saber qué había detrás. Riesgo de ser una liada y llegar tarde a cenar, más que nada 😀
Por suerte fue cojonudamente bien, y entramos directos en el glaciar. Largo glaciar casi plano hasta el refugio.
Ahí cometimos el error de estimar que estaba cerca y no comer, con lo cual estuvimos cruzando, con el coñazo de los monticulillos que hace la nieve fundida que te hacen la pisada inestable. Y si ya tienes signos de cansancio como en nuestro caso se vuelve un coñazo. Luego ya traza, subir al refugio por el camino,etc. con viento muy bestia!!
Al final llegamos para sentarnos a cenar, 12h de pateo en total. Uf.
Pero con desnivel, glaciar, mochila pesada, etc…que nos dejó trinchados. Alex se va a dormir al poco de cenar. Yo me quedo a estirar un poco, pensando en el día siguiente. Cura de sueño salvaje, levantándonos para desayunar a las siete.
El tiempo sigue fatal, con viento fuerte y los picos tomados por las nubes. Así que descartamos la Aiguille du Tour que estaba en el plan desde el principio, con ida de dormir luego en Albert 1er.
Volviendo por el glaciar de Trient
Hace rasca, mucho viento
Y simplemente cruzamos por el col du Tour Superior que es bien sencillo hasta llegar al refugio Albert 1er. Como es pronto cancelamos reserva y nos bajamos al pueblo. Y qué toca cuando bajas de una excursión a la civilización??? COMER!!!!
Col du Tour superior. Parece vertical pero es fácil
Y después de eso ya volver a Montpellier y al día siguiente a Barcelona.
La verdad que hacía mucho pero mucho tiempo que no me metía por glaciares. El primer día no me sentía nada suelto, luego mejor. Enseguida perdí la noción del tiempo, no sabía qué día era. Qué placer!!!
Porque en realidad varios días de vacaciones los he dedicado a currar con nuestro gimnasio LynxCross que ya puedes visitar y usar 🙂
Y esto ha sido una desconexión total. Me encantan los Alpes!